-
Arquitectos: Nuno Brandão Costa
- Área: 600 m²
-
Fotografías:Francisco Ascensão, Arménio Teixeira
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El programa requería la combinación de dos funciones distintas y antagónicas (taller y casa) en una sola construcción, exigiendo su absoluta autonomía, aislamiento y ausencia de cualquier relación visual.
La pendiente natural del terreno y su orientación en relación con el sol fueron la clave de esta difícil ecuación. Dos pabellones en forma de paralelepípedo, dispuestos perpendicularmente entre sí, crean un volumen en forma de L, fragmentado en los diferentes niveles de la topografía existente.
La casa, una nave abierta totalmente orientada al sol con un vano estructuralmente libre, se eleva horizontalmente desde el nivel de entrada del espacio doméstico, que se desprende del suelo y se relaciona continuamente con el paisaje soleado del valle a través de una estrecha galería contigua al espacio interior. De este modo, se convierte en algo externo al terreno y se protege de los sitios vecinos que están desconectados y carecen de interés.
El taller, una nave orientada al este, está construido sobre la base de un corto pórtico que marca el inicio de un largo balcón para la carga y descarga, protegido por bóvedas a juego.
La construcción es un objeto único compuesto por dos elementos, opuestos en estructura, geometría y naturaleza, como exige el programa presentado. Sin embargo, es precisamente en este antagonismo donde la forma parece cobrar sentido y coherencia.